El Cardenal André Vingt-Trois, Arzobispo de París y Presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, ha recibido ayer 9, en el Palacio del Elíseo y de manos del presidente Nicolás Sarkozy, las insignias de oficial de la Legión de Honor.
El Presidente Francés saluda al Card. Vingt-Trois en encuentro el pasado 25 de enero
Junto al purpurado también han recibido la legión de honor grado de oficial Mons. Gérard Verdier, obispo emérito de Guajara-Mirim, Brasil, Mons. Vincent Jordy, obispo de Saint-Claude, Mons. Jacques Perrier, obispo de Tarbes y Lourdes y el P. Olivier Ribadeau-Dumas, secretario general adjunto de la Conferencia de Obispos de Francia.
La legión de Honor es la más alta condecoración francesa. Ella recompensa, en un gran abanico nacional, los méritos adquiridos por los ciudadanos, en todos los sectores de la actividad del país.
"Vos habéis retomado la tradición de esos arzobispos de París que son también intelectuales comprometidos, que ha intentado aportar su respuesta a las grandes cuestiones de nuestro tiempo" señaló el presidente Sarkozy en la entrega del premio al purpurado. Así, él expresó su reconocimiento "por vuestras contribuciones a los debates de nuestro tiempo, quiera que se trate de bioética o de laicidad".
Sarkozy afirmó también que la laicidad bien entendida, es también "una protección para las religiones y los creyentes, el medio de vivir su religión de forma pacífica".
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Fuente:  Gaudium Press

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