El cardenal Jaime Ortega, arzobispo de La Habana, afirmó este viernes, en entrevista concedida a Radio Vaticano que el culto a la Virgen de la Caridad del Cobre es una “devoción nacional”, por lo que se mostró satisfecho de que la visita del Papa tenga lugar en 2012, cuando se cumplan los 400 años del hallazgo de la imagen de la virgen.
“El Papa, si bien había sido invitado desde hace tiempo, muy al inicio de su pontificado, ha tenido ahora una ocasión privilegiada para ir, la conmemoración de los 400 años, el próximo año, del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre”, afirmó Ortega, para añadir: “Esto une al pueblo cubano de manera muy especial. Esta devoción (a la Virgen de la Caridad) es realmente nacional”.
Preguntado sobre las difíciles relaciones Estado-Iglesia que prevalecieron durante cincuenta años en la Isla, el Cardenal cubano aludió al acercamiento de Cuba a las naciones del Este europeo y la Unión Soviética: “El período aquel en Cuba de asimilación a los países del Este de Europa, especialmente a la desaparecida Unión Soviética, donde se copiaron tantas cosas negativas, entre ellas, el tipo de trato a la religión, que era controlado, muy limitado…”, declaró.
Esta situación propició que se “desdibujara” el cristianismo, explicó Ortega, si bien resaltó la importancia de “la religiosidad popular, una religiosidad a veces no formada, no evangelizada”, que se hace evidente ahora en el “fervor” mostrado durante la peregrinación de la Virgen de la Caridad del Cobre que tiene lugar en la Isla, la primera desde 1959.
La visita de Juan Pablo II
Para el Cardenal, la visita de Juan Pablo II “marcó un hito en la historia de nuestra nación cubana, creó un antes y un después”. Indicó además que la próxima visita papal ocurrirá en un momento “increíble” para la Iglesia, que ahora cuenta con mayores posibilidades de comunicación, si bien les falta “sistematicidad”.
“Hemos tenido acceso” a los medios últimamente, pero “nos hace falta sistematicidad”, dijo.
Asimismo, tras la visita de Juan Pablo II desaparecieron las dificultades para la entrada de misioneros en Cuba y se abrieron canales para la recepción de “libros religiosos, filosóficos, teológicos y de divulgación religiosa”.
Ortega habló además sobre la escasez de sacerdotes y religiosas, así como sobre “la crisis vocacional de personas consagradas”, que es “muy grande”, e hizo un llamado a los laicos para que cooperen con la Iglesia católica en la Isla en la propagación de la fe.
Se mostró satisfecho con la construcción del nuevo seminario en las afueras de La Habana, que ya cuenta con 60 seminaristas, si bien percibe menos vocación para la vida consagrada por parte de las mujeres cubanas.
En este sentido, resaltó la ayuda de la Iglesia católica de países como Colombia, México y España, “pero hay que mover” a “los laicos” a que participen en la vida en las comunidades católicas, señaló. “(…) por ahí va la misión, el camino de la Iglesia en el futuro”, dijo.
La última visita de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, en su peregrinaje por toda la Isla, tuvo lugar este viernes en el Combinado del Este, la principal prisión de la Isla. La Virgen fue acompañada por el cardenal Jaime Ortega, según la AFP.