Con la presencia de su Eminencia, el Señor Cardenal, Monseñor Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, de 62 años, en una solemne Vigilia, cargada de piedad y fervoroso canto, y en una magnífica muestra de la piedad popular, se dio comienzo a la fiesta religiosa de Nuestra Señora de Suyapa, Patrona de Honduras. Con el templo repleto, artistas populares, mariachis y fuegos artificiales, el pueblo cristiano, guiado por sus pastores, rindieron homenaje a la Madre del Señor y Patrona de Honduras. La diminuta imagen de Nuestra Señora de la Concepción de Suyapa fue hallada un sábado del mes de febrero, por Alejandro Colindres, un joven y humilde labrador y por un niño de ocho años llamado Jorge Martinez, quienes regresaban a la aldea de Suyapa, cansados de trabajar todo el día en la cosecha del maíz. En 1925 S. S. Pío XII declaró a Nuestra Señora de Suyapa Patrona de la República de Honduras, y se escogió el 3 de febrero como el día de la celebración patronal, con misa y oficio propios.

El primer milagro notable, atestiguado notarialmente, ocurrió en el año de 1796. La primera ermita se bendijo en el 1780 y el templo actual, de enormes proporciones, capaz de albergar a las multitudes que peregrinan a Suyapa, recibió la visita de Juan Pablo II en 1983. En el país de los pobres, este Santuario de Santa María de Suyapa se encuentra enclavado en una de las zonas más humildes de la ciudad.