Lima (Agencia Fides) – En el Mensaje final de la 85ª Asamblea General Ordinaria, titulado «La búsqueda del bien común: fuente de paz y solidaridad», los Obispos peruanos, como Pastores del pueblo de Dios, señalan su voluntad de «iluminar la situación presente con la fuerza trasformadora de Jesucristo para descubrir nuestras posibilidades y reforzar la democracia con justicia y solidaridad por el País, evitando recurrir a medios violentos, que atentan contra la vida y el bien común.» El Mensaje expresa la amargura de los Obispos por la difícil situación que vive el pueblo peruano a causa de la creciente falta de credibilidad de las personas y de las instituciones, de la violencia en las ciudades y en los campos, la corrupción creciente y generalizada. «Esta deplorable situación – según los Obispos – es el resultado de la búsqueda del interés personal, de grupo o de partido, cuando no se tiene en cuenta el bien integral de la sociedad peruana.» Indicando luego que la política es el arte de buscar y realizar el bien común, los Obispos recuerdan que es el bien común mismo quien llama a todos, sin excepción, a participar de manera activa y a unir voluntades para encontrar el camino de la concordia hacia la paz tan deseada. Recordando las palabras del Santo Padre, que ha exhortado a la construcción de un Perú más fraterno y reconciliado, más justo y sin violencia, dónde reine la honestidad, la verdad, la paz, los Obispos exhortan a recuperar la confianza de los unos hacia los otros y en sí mismos, para apuntar juntos hacia un futuro mejor. El Mensaje denota además la preocupación del episcopado por los sufrimientos que atenazan las familias a causa de la violencia, la pobreza y la emigración. La Asamblea del Episcopado peruano ha estado, en efecto, dedicada a los problemas de la familia y ha analizado un documento preparado por la Comisión Episcopal de la Familia que ofrece un análisis sobre como se forma la familia en Perú y se celebra el matrimonio, además de las causas que están engendrando su deformación. El documento ofrece además algunas posibles soluciones a los problemas indicados. Una vez actualizado con las observaciones de los Obispos, el documento será publicado en breve tiempo. La asamblea tiene provisto también la elección de la Delegación de la Iglesia peruana que participará en el próximo Sínodo de Obispos, en octubre: Mons. José Ríos Reynoso, Arzobispo de Arequipa; Mons. Pedro Barreto Jimeno, Arzobispo de Huancayo y el Cardenal Juan Luis Cipriani, Arzobispo de Lima. Como Delegado sustituto ha sido designado Mons. Juan Antonio Ugarte Pérez, Arzobispo de Cuzco. Ha sido también confirmado en su cargo como Secretario General de la Conferencia Episcopal, para el período 2005-2007, Su Exc. Mons. Juan José Larrañeta Olleta O.P, Vicario Apostólico de Puerto Maldonado. (RZ) (Agencia Fides 25/1/2005, Líneas: 37 palabras: 504)
