CHILE. 31 DIC. La Vicaría para la Pastoral de los trabajadores del Arzobispado de Santiago, a través del Vicario Pastoral,Pbro. Ignacio Muñoz, quiere manifestar su fehaciente apoyo a la normativa legal que se ha puesto en vigencia desde el 1º de enero de este año, que reduce la jornada laboral de 48 a 45 horas semanales. Sin lugar a dudas es un muy buen paso el que se da en favor de la humanización del trabajo y en consecuencia de la calidad de vida de los trabajadores y sus familias. Confiamos en la mayor comprensión y flexibilidad posible de los empleadores frente a esta medida anhelada por años en bien de la justicia social. Estamos ciertos que de ninguna manera puede significar una disminución de los sueldos y beneficios estipulados en los Contratos respectivos. Esperamos una responsable fiscalización de parte de los inspectores de la Dirección Nacional del Trabajo. Pbro. Ignacio Muñoz M. Vicario Episcopal