CIUDAD DEL VATICANO, 26 (FD) – El papa Juan Pablo II recordó el «heroico testimonio» de fe del nuncio en Burundi, monseñor Michael Courtney, asesinado en diciembre de 2003, y abogó para que su legado pueda «infundir un renovado vigor a aquellos que luchan por la paz» en Africa. «Deseo renovar a cada uno de ustedes la expresión de mi aprecio por el precioso servicio que ofrecen a las comunidades eclesiásticas y civiles de Africa», dijo el Papa al recibir en audiencia a los nuncios en ese continente. Courtney fue asesinado el 29 de diciembre de 2003 en Burundi por un grupo armado.