Roma, 2 (NE – eclesiales.org) La verdadera riqueza “no es aquella constituida por los bienes materiales, sino aquella espiritual”. Así lo señaló ayer el Papa Juan Pablo II, al reunirse con grupos de peregrinos para el rezo del Angelus. En su breve alocución antes de la oración mariana, el Pontífice afirmó que la verdadera riqueza “consiste en el reconocer el primado de Dios sobre nuestra vida, dejándonos conducir, en cada elección cotidiana, por Su Evangelio” Asimismo, el Papa destacó su próximo viaje el santuario mariano de Loreto, “donde estaré el 5 de septiembre para unirme a la peregrinación nacional de la Acción Católica Italiana”. “Tendré alegría, en tal circunstancia, de inscribir en el elenco de los Beatos a tres miembros de la Asociación: el médico y posteriormente sacerdote Pedro Tarrés y Claret de Barcelona, y los jóvenes Alberto Marvelli y Pina Suriano, ambos italianos”, agregó. “Exhorto a los miembros de la Acción Católica a intervenir en gran número”, dijo el Papa; “¡Los espero en gran número queridos míos! ¡Espero a los niños, a los jóvenes a la familias!” “Juntos pediremos a la Virgen Lauretana que nos obtenga una nueva primavera de gracia y de compromiso para la Asociación y para todo el pueblo cristiano”.