Madrid, 26 (NE – eclesiales.org) En el día grande del año Jacobeo, el Arzobispo de Santiago de Compostela, Monseñor Julián Barrio, presidió ayer domingo la celebración principal en la Catedral de Santiago de Compostela. La Misa contó con la presencia de los reyes de España, y así como del Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Durante la homilía —y luego de la ofrenda del Rey Juan Carlos de Borbón al Apóstol—, Monseñor Julián Barrio observó que lamentablemente en la España actual «el laicismo se presenta como dogma público fundamental y la fe es simplemente tolerada como opinión privada» y que, sin embargo, «no es posible entender y servir de verdad a España sin tener en cuenta las raíces cristianas». En el mismo sentido, recordó que “la doctrina social de la Iglesia considera que el sistema democrático funciona únicamente en una conciencia rectamente formada y ésta enmudece si no está orientada conforme a los valores éticos y morales fundamentales de la dignidad de la persona humana que pueden ser puestos en práctica incluso sin una explícita profesión del cristianismo”. Asimismo, manifestó que la Iglesia que peregrina en España tiene necesidad urgente de «testigos militantes, capaces de vivir la fe sin complejos ni disfraces, en escucha y en diálogo».