pedofilia

Las redes apuestan por la «cultura de la cancelación»

Los dueños de las redes sociales censuran. La Inquisición del Nuevo Orden

 La práctica de moda en la ultraizquierda


En Junio del 2020, 150 intelectuales, como Noam Chomsky o Margaret Atwood, publicaron un manifiesto denunciando el imperante clima de intolerancia y la «restricción al debate»

En Junio del 2020, se publicó en Harper’s la carta de 150 prestigiosos intelectuales, entre los que se encontraban nombres tan ilustres y de tendencia progresista como los de Margaret Atwood, Noam Chomsky, Salman Rhusdie o J. K. Rowling, en donde estos alertaban sobre algo que venían observando: una «restricción del debate». Así, en términos generales, aunque acentuado tras las protestas raciales por la muerte de George Floyd. Y pedían, por ello, «preservar la posibilidad de desacuerdos de buena fe sin consecuencias profesionales nefastas». Básicamente, lo que hacían estos pensadores era poner sobre la mesa su rechazo a lo que se conoce como «cultura de la cancelación» o «cultura de cancelar» (en inglés «cancel culture»), y alertaban de que esta práctica estaba en auge en la ultraizquierda

Pero, ¿qué es «la cultura de la cancelación»? Es un concepto de hace un lustro, en realidad, pero básicamente consiste en que un personaje público dice algo inconveniente u ofensivo, y rápidamente desencadena una reacción que busca la «cancelación» de su persona, esto es una serie de boicots a su labor profesional, o a la plataforma que le sirve de altavoz a sus reflexiones, a sus empleadores, etc. En definitiva, supone el fin de su reputación.

« Se produce una reacción pública, a menudo alimentada por las redes sociales progresistas», dice el portal estadounidense de noticias y opinión «Vox», y «luego vienen las llamadas públicas para cancelar a la persona, es decir, para acabar su carrera o revocar su prestigio cultural». O como dice «Dictionary», en su ramificación de cultura pop, «la cultura de la cancelación se refiere a la práctica popular de retirar el apoyo («cancelar») a figuras públicas o empresas después de que hayan hecho o dicho algo considerado desagradable u ofensivo. La cultura de cancelación generalmente es realizada en las redes sociales en forma de vergüenza grupal».

The Walt Disney Company es la compañía de medios y entretenimiento más grande del mundo, un imperio que se ha agrandado aún más tras comprar 21st Century Fox. Pero como bien saben, tristemente, se parece poco a la que antaño era la multinacional de la inocencia creando contenidos para la infancia: ahora le gusta su perversión al apostar a lo grande por la ideología de género (feminismo y homosexualismo), panteísmo y por supuesto, nada de Dios.

¿El motivo? La compañía es una fiel seguidora del pensamiento políticamente correcto que impulsa el Nuevo Orden Mundial (NOM). Así, la mayoría de sus contenidos están lejos de ser una propuesta inocente de entretenimiento y están más cerca del adoctrinamiento.



Fuente: The epic times – ABC