Buenos Aires/ARGENTINA.- La elección se efectuó en Buenos Aires, dentro de la primera asamblea general o “capítulo” de la nueva provincia de San José del Sur, en el que participan 50 delegados de las 24 comunidades claretianas distribuidas en los cuatro países.
El padre Gutiérrez, de 37 años, se convierte en uno de los superiores provinciales más jóvenes de los misioneros claretianos. Nació en Curanilahue en 1974, se incorporó oficialmente a la congregación en 1997, y fue consagrado sacerdote en 2004. Titulado en Pedagogía y Filosofía, ha laborado en el servicio parroquial y en educación. Hasta mediados del año pasado fue director del Instituto Claret y de la Escuela Especial Nº 13 que la congregación mantiene en Temuco. Designado entonces superior interino de la nueva provincia en formación, asumió como objetivo primordial organizar el primer capítulo, que ahora lo ha elegido para conducir la nueva organización internacional por los próximos seis años.
La asamblea eligió también a cuatro consultores del nuevo superior como equipo de gobierno: los misioneros Francisco San Martín de Angelis, argentino, Agustín Cabré Rufatt, chileno que condujo la provincia claretiana nacional entre 2001-2011, y los españoles Alonso Sánchez Matamoros y Joaquín Medina Romero, ambos con vasta experiencia en misiones claretianas de Argentina y Paraguay.
La nueva provincia de San José del Sur amplía el campo apostólico de los claretianos en el cono sur del continente, al conformar en un solo equipo a más de 120 misioneros de los cuatro países, los que, entre otras actividades, tendrán a su cargo 22 parroquias, 10 colegios, 5 santuarios, 2 editoriales y otros tantos equipos de comunicaciones.
El núcleo incial de esta labor evangelizadora se sitúa históricamente en Chile, primer país en que la congregación se consolidó fuera de España, donde fue fundada por san Antonio María Claret en 1849. Los primeros misioneros llegaron a Chile en 1870, y desde aquí iniciaron su avance por el Cono Sur, dedicados de preferencia a la evangelización popular y la educación.