En el Corazón de Cristo y en los brazos maternales de María, Reina de la Paz:
Estamos a pocas horas del momento en que el Vicario de Cristo camine por tierra chilena.
Le pedimos tres intenciones fundamentales para el rezo del Santo Rosario para estos 3 dias:
Pedir por los frutos de conversión y santidad para Chile, los católicos, el clero y religiosas. De modo especial la conversión de los que ejercen los 3 poderes del Estado, los medios de comunicaciones, empresarios y jefes de familia.
Pedir por las almas que viven en pecado mortal, por las que viven en tibieza, no evitan el pecado venial y viven en la ociosidad, consumismo y en la búsqueda de placer. Especialmente por aquellos que viven una práctica de fe externa pero con su vida, conducta o pensamiento y con los pecados de mentira, murmuración, decidía y celos.
Pedir por nuestra propia conversión, que significa no solo evitar el pecado, sino que anhelar crecer en la gracia de Dios, como quiere María Santísima, para que en todo busquemos la voluntad de Dios y no la nuestra. Esta petición significa pedir el fervor y la santidad de vida, pedir el don de la penitencia final y que vivamos cada día como si fuera el último, con una intensidad de Fe y Esperanza que nos regala el Señor ,y en la Caridad de Cristo, amando a Dios y al prójimo como nuestro Redentor nos enseñó a amar: hasta dar la vida.
Es muy importante orar en estos 3 días previos a la visita del Santo Padre, ya que la presencia del Vicario de Cristo significa un derramamiento abundante de gracias para un país, una familia y las almas.
Y es muy importante que sea la conversión personal y la de todos los que nos rodean, nuestra petición principal, ya que el espíritu de las tinieblas que está destruyendo los pueblos por medio de la corrupción de los que ejercen el poder, la violencia, los vicios y el ataque a la familia y la vida, no se impone por fuerza exterior sino a través de las conciencias que se relajan en la tibieza, la desidia espiritual, el desprecio a la virtud y el sacrificio generoso por el bien de los demás. Por el egoísmo, la vanidad y los apegos a nuestros pequeños ídolos del poder, el placer y el tener, entra la corrupción a los corazones, como enseña el Papa Francisco, entonces ya no avergüenza pecar, mentir, manipular o murmurar. Se hace cotidiano mentir, difamar, engañar y robar.
Si nosotros somos fieles al Señor, movidos por el Espíritu Santo, cerramos la puerta al maligno, no solo en nuestros corazones que le pertenecen a María, son también obstaculizamos su acción en nuestro entorno familiar y la sociedad que nos rodea.
Unámonos en estos 3 días por medio del Santo Rosario, la Santa Misa y la Adoración. Hagamos Penitencia y ofrezcamos, en lo posible, nuestra confesión. Dejemos que el Espíritu Santo inunde nuestro corazón al Corazón de Jesús, como humilde sagrario de su Misericordia y en los brazos de la Reina de la Paz, dejémonos inundar de las gracias que el Espíritu Santo nos quiere otorgar, por medio de la visita del Santo Padre el Papa Francisco. Que nuestros pequeños corazones sean transformadas en hogueras humildes del amor maternal de María para encender nuestros pueblos del Amor del Reino de Cristo, donde abundará de verdad la Justicia, el Bien y la Paz.
La bendición del Señor para usted!!!