El Santo Padre, Benedicto XVI expresó durante la audiencia general de los miércoles que la caída demográfica provocada por la baja natalidad en algunos países priva de futuro a esas sociedades, y subrayó que el nacimiento de un hijo es «un don que aporta vida y bienestar a la sociedad». «Sabemos que en algunos países el descenso demográfico priva de frescura, energía y del futuro encarnado en los hijos», agregó Joseph Ratzinger. El Papa, que llegó al Vaticano en helicóptero desde su residencia de verano en Castelgandolfo, unos 25 kilómetros al sur de Roma, comentó el salmo 126 al hablar del nacimiento de los hijos y la baja natalidad en los países desarrollados. «Somos conscientes en nuestros días que muchas naciones se ven privadas de la frescura, de la energía, del futuro encarnado en los hijos a raíz de una caída demográfica», expresó.