Por María deben los más pequeños subir perfecta y divinamente al Altísimo

DÍA  24

SEGUNDA SEMANA

CONOCIMIENTO DE MARÍA 

Los actos de amor, afectos piadosos hacia la Santísima Virgen, imitación de sus virtudes, especialmente su humildad profunda, su fe viva, su obediencia ciega, su continua oración mental, su mortificación en todas las cosas, su pureza incomparable, su caridad ardiente, su paciencia heroica, su dulzura angelical y su sabiduría divina: «siendo esto» como dice San Luis María Grignion de Montfort, «las diez virtudes principales de la Santísima Virgen». Tenemos que unimos a Jesús por María, ésta es la característica de nuestra devoción; por tanto, San Luis María Grignion de Montfort nos pide que nos empleemos a fondo para adquirir un conocimiento de la Santísima Virgen. María es nuestra soberana y nuestra medianera, nuestra Madre y nuestra Señora. Esforcémonos, pues, en conocer los efectos de esta realeza, de esta mediación, y de esta maternidad, así como las grandezas y prerrogativas que son los fundamentos o consecuencias de ello. Nuestra Santísima Madre también es perfecta – un molde en donde podemos ser moldeados para poder hacer nuestras sus intenciones y disposiciones. Esto no lo conseguiremos sin estudiar la vida interior de María, o sea, sus virtudes, sus sentimientos, sus acciones, su participación en los misterios de Jesucristo y su unión con Él. 

Oraciones vocales

Anotaciones


DÍA 24

Meditación breve:

MONTFORT:
-Es un camino fácil: Es un camino que Jesús ha recorrido viniendo a nosotros, y en que no se encuentra ningún tropiezo para llegar a Él. Es verdad que es posible llegar a la unión con Dios por otros caminos, pero será pasando por muchas más cruces y extraños desfallecimientos, y al través de muchas más dificultades, penosísimas de vencer.
-Es un camino corto: Esta devoción a la Santísima Virgen es un camino corto para hallar a Jesucristo, ya sea porque en él no hay extravíos, ya sea porque, como acabo de decir, por él se camina con más gozo y facilidad y, por tanto, con más prontitud. Se avanza más en poco tiempo de sumisión y de dependencia de María, que en años enteros de propia voluntad y de apoyo sobre sí mismo. 

-Es un camino perfecto: Esta devoción a la Santísima Virgen es una senda perfecta para ir a unirse a Jesucristo, toda vez que la divina María es la más perfecta y la más santa de las puras criaturas, y que Jesucristo que vino perfectamente a nosotros, no tomó otro camino para su grande y admirable viaje. El Altísimo, el Incomprensible, el Inaccesible, El que es, ha querido venir a nosotros, pequeños gusanos de la tierra que nada somos. ¿Cómo se ha obrado esto? El Altísimo ha descendido perfecta y divinamente por María hasta nosotros sin perder nada de su divinidad y de su santidad, y por María deben los más pequeños subir perfecta y divinamente al Altísimo sin temor alguno. 

-Es un camino seguro: Esta devoción a la Santísima Virgen es un camino seguro para ir a Jesucristo y adquirir la perfección uniéndose a Él. Porque esta práctica que enseño, no es nueva; es tan antigua, que no se pueden marcar sus principios. Y no se la podría condenar sin trastornar los fundamentos del cristianismo. Consta, pues, en conclusión, que esta devoción no es nueva, y que si bien no es común, consiste esto en que es demasiado preciosa para ser saboreada y practicada por todo el mundo. Esta devoción es un medio seguro para ir a Nuestro Señor, porque es propio de la Santísima Virgen el conducirnos seguramente a Jesucristo, como lo es de Jesucristo llevarnos seguramente al Padre Eterno. (Tratado de la Verdadera Devoción… núms.152- 164) 

PREGUNTATE:
A) REFLEXIONA CADA UNA DE LAS CARACTERISTICAS DE ESTE CAMINO QUE ES LA CONSAGRACION TOTAL A ELLA Y GOZATE EN CADA UNA…. 

Meditación extendida:

Virtudes de la Santísima Virgen

Composición de lugar. Ver a Nuestra Señora en el momento de pronunciar el ecce ancilla Domini, palabra en que se reflejan todas sus principales virtudes.

Petición. Conocimiento interno de la Virgen Nuestra Señora, para que más la ame y la imite.

“Debemos examinar y meditar las grandes virtudes que practicó en su vida, particularmente:

Punto I. Su fe viva, con la cual creyó sin dudar la palabra del ángel; creyó fiel y constantemente hasta en el Calvario, al pie de la cruz.

Fe más grande que la de todos los patriarcas, profetas, apóstoles y santos…”

San Luis María nos asegura que cuanto más nos entreguemos a Nuestra Señora, más participaremos de la fe que ella tuvo: “Fe pura, con que no hagas caso apenas de lo sensible y lo extraordinario; fe viva y animada por la caridad, con que no hagas tus acciones sino por motivo de amor puro; fe firme a inquebrantable como una roca, que te hará permanecer firme y constante en medio de las borrascas y tormentas; fe activa y penetrante, que, como llave misteriosa, te dará entrada en todos los misterios de Jesucristo, en los destinos últimos del hombre y en el Corazón del mismo Dios; fe valerosa, que te hará emprender y llevar a cabo cosas grandes por Dios y por la salvación de las almas.

P. II. “Su humildad profunda, que la hizo ocultarse, callarse, someterse a todo y colocarse la última.”

A la luz de esta conducta de la Santísima Virgen examinemos la nuestra y veamos si procedemos en todo con la humildad que supone el nombre y el oficio de esclavos.

P. III. “Su pureza del todo divina, que jamás tuvo, ni tendrá, semejante debajo del cielo.”

Pureza de cuerpo y de alma, de afecto, de intención; limpieza inmaculada de toda sombra de pecado. Con ser Nuestra Señora tan eminente en todas las virtudes, esta de la pureza parece que tiene en Ella particular resplandor, y así, a esta virtud se refieren los más comunes nombres que la damos: la Virgen, la Purísima, la Inmaculada. Esta virtud debe ser también como la librea, que distingue a los hijos de María. “Esté grabada en vosotras como en una imagen la virginidad y la vida de María; de ella, como de un espejo, se refleje en vosotros el ideal de la castidad y el ejemplar de la virtud.” (San Ambrosio, De Vig., 1. 2.)

P. IV. “Finalmente, todas las demás virtudes.”

Muchas meditaciones necesitaríamos para considerarlas. Fíjese cada uno en aquellas virtudes que más necesite; que de todas ellas encontrará modelo acabado en esta Reina de los Ángeles.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *